A ver, tú si, tú. Dime. ¿Quién te escucha si no soy yo? A ver dímelo. Sí, háblame de quién llora contigo si no soy yo. Sí. tú. Súsurrame. Susúrrame al oído y cuéntame quién te hace reír y quien te acompañará hasta el fin. Sí tú. Pero ahora yo te digo: quizá yo ya no te escucharé. Sí, yo, quizá ya no lloraré contigo, ni te haré reír. Si, tú, ahora escúchame, porque quizá ya no te acompañe más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario